Boca enfrenta un momento crítico en la temporada y el duelo pendiente frente a Barracas Central se convirtió en un verdadero examen de carácter. El equipo de Claudio Úbeda necesita ganar sí o sí en el Estadio Claudio "Chiqui" Tapia para mantener vivas sus chances de ingresar a la Copa Libertadores 2026.
La reciente caída ante Belgrano en La Bombonera dejó un sabor amargo: no solo se perdieron puntos valiosos en la Tabla Anual, sino que también se escapó la posibilidad de superar a River, algo que habría aliviado la presión sobre el plantel y generado un envión anímico para los hinchas. Hoy, con 50 puntos y en el quinto lugar, Boca se encuentra fuera de los puestos de clasificación directa y depende de sí mismo para recuperar terreno.
Una victoria frente a Barracas lo colocaría nuevamente en zona de privilegio, pero un nuevo tropiezo complicaría seriamente sus aspiraciones, más aún con solo tres fechas por jugar. El fixture no da respiro: después de este partido, el Xeneize deberá enfrentar a Estudiantes, River y Tigre, cuatro encuentros que definirán el rumbo de la temporada y el futuro de varios jugadores del plantel.
Pese a la presión, Úbeda cuenta con la ventaja de que el equipo todavía tiene el control de su destino: con tres victorias y un empate, la clasificación estaría asegurada. Boca necesita reaccionar rápido y recuperar la regularidad mostrada en algunos tramos de la temporada para no cerrar el año con otra frustración. La primera prueba llega este fin de semana: Barracas espera, y no habrá margen de error.




